Hoy volvemos con una receta rusa a recordar que estamos con un conflicto bélico en nuestra vieja Europa. En realidad, éste es el motivo de este reto, que me autoimpuse desde hace casi un año, para colaborar, en la medida en que uno puede hacerlo, con otros organismos similares, para intentar detener esto y recordar que vivimos en el S.XXI y que estos conflictos son tan penosos como vergonzosos. Todo debería poder arreglarse en conversaciones, entre gobiernos (=personas) inteligentes que un pueblo ya formado, ha elegido democráticamente. Si esto no fuera posible, existen organismos externos y creados expresamente, tras la Gran II Guerra Mundial, para que éstas cosas no volvieran a suceder. Miles de euros, que se van en cumbres, en reuniones, hoteles, comidas, espectáculos, traductores, iluminación, etc… para justo evitar esto. Sí, soy muy, muy ingenua. Creer que el mundo funciona así, ya no es de ingenua sino casi de tonta. También creía que los hastags etiquetados al principio de la guerra relacionados con la gastronomía/guerra se harían eco de mi iniciativa (no por importane sino por una más) y quizás otros blogs, otras personas que cómo yo tienen inquietudes gastronómicas y culturales, sobre todo cuando se trata de ponerse banderas en su imagen, o repostear videos sobre el horror de los niños, las mujeres y las muertes que todo esto provoca. Pero también fui ingenua y casi tonta. A nadie le interesa cómo son estos pueblos que ahora están en conflicto y a nadie parece despertarle una curiosidad gastronómica conocer esas culturas con las que empatizan tanto en algunos momentos. Y con el a nadie incluyo editoriales, influencers cuyo seguimiento hubiera podido difundir, ó revistas gastronómicas/restaurantes de estos países ó a los blogs de los que he sacado las recetas, salvo excepciones, y siempre he etiquetado. Las estadísticas y los seguidores, se ve, también necesita los likes y no están libres de competencia.
En mi casa cada semana se ha comido un plato, delicioso por cierto, o ruso o ucraniano, un hecho que nos ha acercado a una realidad cruda buscando el saber cómo son estas personas que, hasta hace un año eran y vivían como nosotros. Y no hablo sólo de los ucranianos, el pueblo ruso también sufre las consecuencias de todo esto y la mayoría de personas rusas tienen familiares que viven o son ucranianos o viven e las zonas en conflicto. Es por ello que cada semana hemos dedicado nuestras cocinas alternativamente a ambos.
Necesitaba decir esto, porque una vez más la blogosfera… este mundo tan rico, amplio y destinado a difundir, se ha quedado callado. O quizás en mi ingenuidad este trabajo mío, de investigación, búsqueda y puesta en escena, el tratar de decirle al mundo, “estamos aquí y tampoco estamos de acuerdo” no era al fin y al cabo ni tan solidario, ni tan importante. Por cierto que he generalizado, no quisiera haber molestado a las personas que dulcemente han puesto/apoyado comentarios en mis post.
----
Y ahora vamos con la receta de esta semana. Se trata de una receta rusa, por lo popular que se hizo durante la Unión Soviética, pero que en realidad se conoce desde el S.XV, con el nombre de Kalya. Lo fundamental de esta sopa es el rassol, la mezcla que quedará de usar el zumo de los pepinillos y algunas hierbas. La versión vegetariana, sin carne, suele hacerse en Cuaresma y en la versión con carne en muchas versiones lleva riñones. Se le conocen efectos antiresaca, aunque no está demostrado. Existe una pequeña batalla entre Moscu y San Petersburgo sobre la preparación de esta sopa. En la primera se hace con pollo o pato y se sirve con una mezcla de huevo y un pastelito de acompañamiento, hecho de queso cottage. En San Petersburgo sin embargo se hace con carne de ternera, como nuestra receta, y se sirve con crema agria y también lleva tomate en su preparación. Es una sopa sencilla y sabrosa, y en esta ocasión se hace con cebada en grano. Uno de los puntos buenos de este reto ha sido el haber aprendido y probado el cocinar con granos de trigo, sarraceno y en esta ocasión cebada. Aunque en la recetas que he usado se pone tomate, yo no le he puesto respetando su origen dónde el tomate aún no había llegado. De hecho hay muchas recetas en la red sin tomate.
La receta que he usado es la de Natascha’s Kitchen.
RASSOLNIK
Ingredientes:
(para 4-6 personas)
3 l de agua o caldo suave
400g aprox. de carne de ternera cortada fina y en cuadraditos
50/60g de Cebada en grano
300g de pepinillos en conserva, mejor los agridulces (aprox. cortados en brunoise)
2 patatas
2 zanahorias
1 cebolla
1 rampa de apio
Eneldo
2 hojas de laurel
sal/Pimienta (si es posible en grano)
AOVE
Crema Agria para acompañar (yo uso la de Présidento la auténtica rusa de las tiendas de productos rusos)
1. Ponemos a hervir el agua con la cebada y la carne, parcialmente tapado unos 30’
2. Añadimos las patatas cortadas en brunoise, 1 zanahoria en rodajas y los pepinillos en brunoise (en la receta los pasa por la sartén con un poco de aove, pero no me parece necesario). 10’ mientras preparamos la mirepoix.
3. Preparamos la mirepoix en una sartén con aove. Cortamos finamente la cebolla y la ponemos en la sartén. Rallamos la otra zanahoria y la añadimos y finalmente el apio. Cuando todo esté blandito lo añadimos a la sopa.
4. Añadimos las 2 hojas de laurel, los granos de pimienta, parte del eneldo (reservamos para adornar), y dejamos hacer unos 2-5’ hasta que las patatas estén hechas.
5. Rectificamos el punto de sal si fuera necesario. Añadimos más eneldo por encima.
6. Servimos con nata agria al lado para acompañar la sopa.
#lunesporlapaz #mondaysforthepeace
UCRANIA
Manja, Kuleshbnyk, Yavorivskiy pie, Kutiá, Bogracz, Uzvar, Fluffy apple oladky, Lokshyna, Dushenyna, Kolach, Holubtsy, Bublik, Halushki, Korovai, Pampushka, Eggs and chieves salad, Banush, Baklazhanmezhivo, Okroshka, Ivivsymyk, Vareniki, Serdakh, Borscht, Kapusnyak, kievchichken
RUSIA
Gribnoysoup, Rassolnik, Sharlotka, Holodets, Tefteli, Sbiten, Plov, Russian frikadeller soup, Plov, Zharkoe, Shchi,Baklazhannaya ikra (caviar de los pobres), Solianka stew, Ensaladilla Olivier, Borodonsky bread, Napoleon torte, Jolodnik, Belyashi, Summer salad, Raguizovoshej, Vatrouchka, Shuba, Beefstroganov