Un lunes más me encuentro ante el apasionante reto de hacer una receta rusa o ucraniana en mi pequeño (por hormiguita dentro de la humanidad no por el tamaño del deseo en sí) de que, deje de haber una guerra; que haya jóvenes que hayan visto sus futuros rotos, a niños que no tendrán navidades ni fiestas de cumpleaños ni un hogar en el que tener sus juguetes, a padres que sufrirán por ello y a ancianos sin futuro y casi sin presente. Un lunes más, lo pido: a la humanidad, a todos los dioses sean de la religión que sean y al fin a los políticos que juegan a veces a ser “dioses”.
En esta lucha he descubierto una gastronomía maravillosa que cada día me tiene más enamorada. Ukrania y Rusia, durante años han compartido una misma gastronomía, y hoy en día sus platos tienen muchos rasgos en común; se hace difícil a veces delimitar cuando una receta es de un sitio o de otro, porque muchas veces aparece en ambas gastronomías.
Leo en el blog rusiabeyond que en la gastronomía rusa hay profusión de sopas (bueno a mi me parece que en nuestra gastronomía también!) . Son un alimento en tiempos de frío, un clima que predomina en todo el país durante mucha parte del año. Sopas, muchas veces hechas con verduras y tubérculos que aguantan bien el no estar de temporada. En muchas ocasiones estas sopas llevan carne o salchichas espaciadas y se convierten en plato único. Así la gente podía ir al trabajo, el campo u otros de dureza, con el estómago lleno y caliente. El gazpacho, sin ir más lejos, fue en sus inicios un alimento del campo y sus trabajadores.
La que nos ocupa hoy me vino inspirada en el instragram de Ekaterina, la dueña del restaurante barcelonés ruso Ekaterina. Ella publicaba una foto de esta sopa que le traía recuerdos felices de su infancia. Así que me puse manos a la obra. A esta sopa la llaman también el borchst frío y se la conoce como sopa de verano. Su nombre es Jolódnik (Jólod, significa frío) y también se la conoce como Svekólnik y en la versión con carne suele llevar salchicha espaciada; en Polonia la llaman Chlodnik y en Lituania Saltibarsciai.
JOLÓDNIK O SVEKÓLNIK
Ingredientes:
(para 4 personas)
2 patatas
2 huevos
2/3 remolachas (según tamaño)
1 pepino
1 ramillete de rábanos
1 vaso de kéfir
limón
Eneldo
Cebollino
Para acompañar:
Nata Agría (yo usé la de Láctics saborit)
Mostaza (en grano preferiblemente)
1. Hervimos las remolachas, las patatas y los huevos. El agua de hervir la remolacha la guardamos para añadir a la sopa. Dejamos enfríar.
2. En un bol, rallamos la remolacha, cortamos en cuadraditos la patata y el huevo (el otro lo dejamos para adornar). También lo hacemos con el pepino y los rábanos.
3. Añadimos el kéfir y agua de hervir las remolachas hasta que tenga la consistencia de sopa que nos guste. Ha de ser espesa. Cogerá un tono rosado, burdeos precioso.
4. Incorporamos las especies bien pequeñitas.
5. Ponemos la sal y la pimienta y adaptamos a nuestros gustos.
6. Para servir, ponemos un cacito con crema agria y otro con mostaza. Y a disfrutar.
приятного аппетита!
Con unas buenas remolachas, dulces, debe estar riquísimo! Yo descubrí la remolacha haciéndome batidos verdes, pero eran unas remolachas riquísimas 😍 antes había provado y supongo que me pasó como con la naranja sanguina de la macedònia, no estaba en su mejor momento. Cuando prové de hacer una vez una sopa de remolacha estaba vomitiva.
ResponderEliminarRespeto a la guerra, una amiga que acogioó una familia, pues no fue tan bien como se esperava, nos cargan con la responsabilidad de salvar el mundo y no podemos ni estamos preparados. Como decia Merlí, que arregle elmundo quin lo ha estropeado.... Pero si lo estropean, que ganas tendran de arreglarlo. Así que esta en la buena y bien intencionada voluntad de los de a pie de hacerlo un poco mas llevadero 😔😔