Ha llegado al fin el día en que
puedo dedicarle un post a uno de mis más adorados alimentos. La berenjena!!!
Una mañana, Kike, uno de los mejores hombres-jefes-compañero con los que he trabajado, se medio escandalizó cuando me oyó hablar sobrela berenjena. Bueno ,
también se quedó extrañado, sorprendido, de que le encontrara cualidades tales
que resumí bajo el adjetivo de “libidinosa”.
Y sí, ciertamente es exagerado atribuir “connotaciones sexuales” a los alimentos, pero ni soy la primera nila última. No creo en el
poder estimulante de los alimentos pero si en el poder de la sugerencia, de la imaginación. Hay
alimentos que poseen texturas, sabores que conectan nuestros cerebros con
sensaciones placenteras que en ocasiones, son cercanas a las vividas con las
personas amadas. No se trata de sensaciones vulgares sino del peso de una
caricia, de una mano en la oscuridad, de un beso robado o del placer cuando
sabemos que vamos a encontrarnos con alguien que nos hace vibrar.
Quién no oyó hablar de las mariposas en el estómago, de las cosquillitas en el corazón, de la piel erizada ante la intensidad de una cercanía amada?
Con algunos alimentos, y como en ninguna otra película, se exterioriza en “Como agua para Chocolate” algunas de las sensaciones que nos transmiten los alimentos son parecidos a ese “disparo eléctrico” que se siente con otro tipo de estímulos. Quién no ha paladeado un chocolate caliente y ha sentido el placer de los brazos de madre o su abuela?, Quién no ha ha cerrado los ojos al probar un determinado guiso de cuchara y ha “sentido” el olor de la chimenea de la casa familiar de su infancia?, Quién no ha olido un cocido y ha sentido que era Navidad?, quién no ha deshecho un bombón en su boca, despacio, suavemente y ha sentido pequeños placeres? y en fin quién no ha sentido el deseo de culminar placeres gastronómicos con placeres humanos?.
Pues eso es para míla berenjena. El
alimento mágico. El que transporta. Su textura, la turgencia de su carne, la
suavidad aterciopelada que incorpara a los platos en que participa (como el que
os traigo), el maravilloso color de su piel, su brillo y en fin…ese sabor,
intenso y suave.
La berenjena me ha llevado a excesos; a no poder dejar de comer un pisto con ansiedad o una Musaka (siempre que estén bien hechas y no nadando en aceite), a no poder dejar de untar una pita tras otra con un buen Baba Ganoush o un Mutabal, patés orientales que son pura maravilla, a dejar atrás una dieta por un desayuno con pan con tomate y una excelsa tortilla de berenjenas (que junto con la de alcachofas son para mi las Number One de las tortillas), a disfrutar de unas "parmigiana" con su fragrante gratinado, o simplemente a "devorar" una trás otro esos maravillosos círculos de berenjena rebozada que suelen servirse de acompañamiento .. Y en fin… friso por descubrir nuevas formas con las que disfrutar dela
berenjena. Es tanto mi amor por ella, que como muchos sabeis,
me ha hecho ser injusta con otras hortalizas que se usan a veces de la misma
forma…. Como el pobre calabacín, a quién llamo el “primo pobre de la berenjena”
aguado e insulso en pistos, tortillas, y rellenos diversos. Perdóname, calabacín…
pero es que tu prima me tiene hechizada.
Resumiendo, y para que me entiendas Kike, yo no creo en alimentos afrodisiacos, pero si creo en el poder de las sensaciones. Y a ellas se llega por caminos muy dispares.
Con esta receta participo además en el concurso de CUQUIN MAGAZINE patrocinado por Le Creusset, en su segundo número que nos invitaba a hacer recetas con cítricos. Espero os guste.
La receta la he sacado del número de Enero de una de mis revistas estrella “Food&Wine” . En ella el chef Morad Lahlou (chef en San Francisco del restaurante con estrella Michelin Aziza) prepara esta deliciosa sopa para una fiesta en un complejo hotelero de Marrakeh, Peacock Pavililions, que gestiona y habita un matrimonio americano. Impresionado por el trabajo fotográfico sobre la vida en Marrakesh que expone Maryam Montague (la esposa) en su blog MyMarrakesch.com, se puso en contacto con ella, y de ahí surgió una amistad y ahora este proyecto. Lahlou dice “que los marroquíes nunca empiezan una comida con una sopa, sino que sirven siete pequeñas ensaladas incluyendo un puré de berenjenas llamado Zaalouk y mucho pan. Esta sopa reúne en ellas el sabor y las especies de estas ensaladas pero resulta más ligera y fresca”. Espero os guste.
Una mañana, Kike, uno de los mejores hombres-jefes-compañero con los que he trabajado, se medio escandalizó cuando me oyó hablar sobre
Y sí, ciertamente es exagerado atribuir “connotaciones sexuales” a los alimentos, pero ni soy la primera ni
Quién no oyó hablar de las mariposas en el estómago, de las cosquillitas en el corazón, de la piel erizada ante la intensidad de una cercanía amada?
Con algunos alimentos, y como en ninguna otra película, se exterioriza en “Como agua para Chocolate” algunas de las sensaciones que nos transmiten los alimentos son parecidos a ese “disparo eléctrico” que se siente con otro tipo de estímulos. Quién no ha paladeado un chocolate caliente y ha sentido el placer de los brazos de madre o su abuela?, Quién no ha ha cerrado los ojos al probar un determinado guiso de cuchara y ha “sentido” el olor de la chimenea de la casa familiar de su infancia?, Quién no ha olido un cocido y ha sentido que era Navidad?, quién no ha deshecho un bombón en su boca, despacio, suavemente y ha sentido pequeños placeres? y en fin quién no ha sentido el deseo de culminar placeres gastronómicos con placeres humanos?.
Pues eso es para mí
La berenjena me ha llevado a excesos; a no poder dejar de comer un pisto con ansiedad o una Musaka (siempre que estén bien hechas y no nadando en aceite), a no poder dejar de untar una pita tras otra con un buen Baba Ganoush o un Mutabal, patés orientales que son pura maravilla, a dejar atrás una dieta por un desayuno con pan con tomate y una excelsa tortilla de berenjenas (que junto con la de alcachofas son para mi las Number One de las tortillas), a disfrutar de unas "parmigiana" con su fragrante gratinado, o simplemente a "devorar" una trás otro esos maravillosos círculos de berenjena rebozada que suelen servirse de acompañamiento .. Y en fin… friso por descubrir nuevas formas con las que disfrutar de
Resumiendo, y para que me entiendas Kike, yo no creo en alimentos afrodisiacos, pero si creo en el poder de las sensaciones. Y a ellas se llega por caminos muy dispares.
Con esta receta participo además en el concurso de CUQUIN MAGAZINE patrocinado por Le Creusset, en su segundo número que nos invitaba a hacer recetas con cítricos. Espero os guste.
La receta la he sacado del número de Enero de una de mis revistas estrella “Food&Wine” . En ella el chef Morad Lahlou (chef en San Francisco del restaurante con estrella Michelin Aziza) prepara esta deliciosa sopa para una fiesta en un complejo hotelero de Marrakeh, Peacock Pavililions, que gestiona y habita un matrimonio americano. Impresionado por el trabajo fotográfico sobre la vida en Marrakesh que expone Maryam Montague (la esposa) en su blog MyMarrakesch.com, se puso en contacto con ella, y de ahí surgió una amistad y ahora este proyecto. Lahlou dice “que los marroquíes nunca empiezan una comida con una sopa, sino que sirven siete pequeñas ensaladas incluyendo un puré de berenjenas llamado Zaalouk y mucho pan. Esta sopa reúne en ellas el sabor y las especies de estas ensaladas pero resulta más ligera y fresca”. Espero os guste.
SOPA “ATERCIOPELADA”
DE BERENJENAS CON GUISANTES BABY Y RÁBANOS
(en la receta original se
usa crema de leche, pero me pareció que quedaría demasiado fuerte. Como yo uso
leches frescas, ricas en nata, me pareció que sería suficiente)
Ingredientes:
500g de leche entera fresca (o crema de
leche)
2 ajos85g aprox. de queso Parmesano de corte triangular, pero sólo su corteza
2 berenjenas
1 limón y su piel
50g de guisantes pequeños congelados
2 rábanos para adornar
Aceite de Oliva vírgen Extra
Sal/Pimienta
Opcional: un poco de caldo vegetal o suave de pollo
Combinar la leche, con el
parmesano y los ajos y llevar a ebullición. Tapar y dejar fuera del
fuego durante 1h. Quitar la corteza del queso y los ajos y reservar la leche.
Cortar las berenjenas por la mitad, untarlas en un poco de aceite de oliva y ponerlas en el horno a 200º unos 40min. dándoles la vuelta a la mitad o hasta que estén hechas.
Cuando estén hechas, pelarlas, pasarlas por el pimer junto con la leche, añadir el zumo de medio limón (ó más ó menos según sean los gustos) y dejar al fuego por espacio de 10min. A mi me pareció que la consistencia era muy espesa y la aclaré un poquito con un caldo ligero de pollo que estaba haciendo.
Hervir los guisantes a parte en agua con sal y laminar los rabanitos con ayuda de una mandolina si se tiene. Servir la sopa y poner lateralmente los guisantes y los rábanos por encima, lo mismo que un poco de piel de limón rallada. Maravillosa!!!!!!
Pd. El cuadro es de mi amiga pintora, Maria Martín
Cortar las berenjenas por la mitad, untarlas en un poco de aceite de oliva y ponerlas en el horno a 200º unos 40min. dándoles la vuelta a la mitad o hasta que estén hechas.
Cuando estén hechas, pelarlas, pasarlas por el pimer junto con la leche, añadir el zumo de medio limón (ó más ó menos según sean los gustos) y dejar al fuego por espacio de 10min. A mi me pareció que la consistencia era muy espesa y la aclaré un poquito con un caldo ligero de pollo que estaba haciendo.
Hervir los guisantes a parte en agua con sal y laminar los rabanitos con ayuda de una mandolina si se tiene. Servir la sopa y poner lateralmente los guisantes y los rábanos por encima, lo mismo que un poco de piel de limón rallada. Maravillosa!!!!!!
Pd. El cuadro es de mi amiga pintora, Maria Martín
Ohohoh
ResponderEliminaryour friend!
yo tambien soy una amante de la berenjena, y esta crema esta genial.
ResponderEliminarM'has deixat bocabadada amb el teu escrit. De vegades, sé que em perdonaràs, les receptes estan molt bé però em quedo amb la teva redacció. M'agrada com escrius i el teu punt divertit d'explicar les coses. Has fet que una senzilla albergínia agafi el protagonisme que es mereix.
ResponderEliminarOh oh, nena tu vales mucho.
Nani
Ostres, realment fa ganes de menjar albergínies amb aquesta oda que els hi has fet! jajajaja
ResponderEliminarAquesta crema fa venir salivera
Petonets
Sandra
Bien, tengo claro quien gana el concurso. Me ha encantado el texto, la receta y el estilo de tu blog. Ya tienes una seguidora
ResponderEliminarTu si que me has puesto la piel de gallina con tu descripción de la berenjena, jajaaa!!
ResponderEliminarMe ha encantado tu entrada!! No puedes haberle hecho mejor homenaje a esta hermosura de vegetal!!
Yo me pongo morada con una crema de berenjena y pimiento que como en el marroquí!!! No puedo parar!!!
Cada día me gusta más y en sopa no la he probado así que me quedo con tu receta!!
Mucha suerte en el concurso!!
Besotesss
PD El cuadro es precioso, enhorabuena a tu amiga!!
Jo també li veig molt potencial a l'albergínia!! Molt bona aquesta crema, la faré segur. Petons!
ResponderEliminarVisca l'alberginia!!! i amb aquesta crema... boníssim!
ResponderEliminarpetonets
Jaja, ara t'asseguro que veuré l'albergínia amb uns altres ulls. L'utilitzo ben poc, és una verdura amb molta aigua i el seu fregit no em convens, a no ser que sigui arrebossada. Jo soc amant del carbassó, per la seva dolçor. Però ja t'ho vaig dir, he de provar la mussaka. I per cert, un paté d'albergínia... ha de ser boníssim!!!!
ResponderEliminarMon, m'encanta el text, t'ha quedat genial, rodó, preciós!!!
I la sopa... la provaré segur, a veure si canvio de opinió sobre l'albergínia, jeje!
Petons, guapa, i que tinguis un molt bon dia!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Per cert, tens un quadre d'albergínies?????????? jajajaja! Bona aquesta!
Para mi las sensaciones son infinitas, provienen de cada pequeña gran vibración que nos rodea y son tantas y diversas que no terminariamos nunca, así como espero que nunca dejes de crear o recrear estas maravillas!! Que oda más hermosa a la berenjena en una crema irresistible!
ResponderEliminarUn abrazo ;)
Doncs jo t'he de dir que sóc més del seu cosí, com dius tu, del carabassó!;)
ResponderEliminarMira, mai m'hauria pensat fer una crema amb albergínies i ha de ser ben bona.
Petons.
Estic totalment d'acord amb tu. I mira que me'n fas venir ganes però és que no m'agraden gaire les alberginies. També prefereixo els carbassons.
ResponderEliminarPetonets guapa
wowwwwwwwwww que post mas libidinoso, no veas la de sensaciones geniales que me has hecho sentir, recordar, añorar, la cremita como tu oda es espectacular, te deseo mucha suerte en el concurso, creo que otra vez conseguiras enamorar con esta arrebatadora crema de berenjena (nunca la he probado en tortilla... hazmela un día, cuéntamela que la pruebe, quiero verla!!! ) un besazo!
ResponderEliminarMe gustan las cremas de berenjena :)
ResponderEliminarUn saludito